domingo, 14 de agosto de 2011

"afuera"





Viendo lo que hay “afuera”, me sumerjo en mi mundo interior. Ese mundo tan rico y tan lleno de color.

No soy capaz de soportar ni un segundo más aquellas conversaciones tan simples que ahora “se llevan”, las llamadas conversaciones de ascensor: el tiempo que hace hoy, la misma discursión por qué lugar decidir para ir a tomar el mismo café de siempre, las mismas preguntas una y otra y otra vez, la historia de la misma noche de fiesta…  No soy capaz de soportarlo, ya no puedo poner ni un segundo más una buena cara y aguantar el tirón.

Y me convierto en “El ermitaño” aquella persona cauta, reflexiva y, aunque no lo parezca, plenamente feliz. Me voy a aquel mundo con aquel parking, bosque y ciudad… con MI mundo. Aquel es el mundo que yo me he creado para mi, para mi ociosidad y recreo, aquel mundo al que voy cuando la mierda del mundo exterior me llega hasta el cuello.

Y no sabéis lo que os perdéis siendo unos simples humanos. No sabéis lo que os perdéis porque no tenéis independencia, y no sabéis lo que os perdéis porque no sabéis ir solos por la calle sin sentiros tontos.

Y no sabéis lo que os perdéis con el simple mundo exterior.



jueves, 4 de agosto de 2011

CONGUITOS!





 Tú y yo, risas, clases, CESPED, batidos, sol, patos, caminar, cuentos e historias, chistes, manos “garra”, sudores por la nariz, tiritas en la cabeza, esquemas, chuletas, BRAVAS, juegos, campus, lágrimas, nervios, cervezas, pelos naranjas, abrazos, ópera, química, “yo canto”, libros, días, MADRID, hamburguesas, más risas, fotos, fotos borradas, chismorreos, lluvia, profesores, pelusas y robots, peleas, violaciones, cafetería de la estación, informática, camareros, películas, hombres, dibujos en paint, conspiraciones, noches, cartas, SAPITOS Y CONGUITOS, clases de baile, enlaces coValentes, miradas, pertur, barbas con calvas, exámenes, primaveras, veranos, otoños e inviernos…

Y se me olvidarán mil y una palabras más… palabras que nos unen y palabras que nos hacen sonreír. Quizá la gente piense que son demasiadas… pero a mí me parecen demasiado pocas, son demasiado pocas las cosas que hemos vivido juntas… los largos días de invierno sentadas en clase de biología comiendo chocolate como si fuésemos unas ninjas, las risas en clase de medio ambiente en las que no hacíamos nada, las patatas en la cafetería de la estación: las mejores que probaré jamás porque las comía contigo, las largas tardes de verano sentados en Anaya sin nada que hacer, pero no hacía falta nada más, no era necesario, aquel bellísimo paisaje con la catedral de fondo es más que suficiente.

Contigo he aprendido cientos de cosas: he aprendido a ser más tolerante con las personas (aunque siempre serás mi niña pija), también he aprendido a ser más demonio de lo que soy, he aprendido la técnica para comer una hamburguesa sin mancharme… tantas cosas…

Con todo esto quiero decirte que te quedes a mi lado al menos otros 21 años más... riendo, llorando, disfrutando…